JULIO CÉSAR Y EL MONSTRUO DE LAVA

JULIO CÉSAR Y EL MONSTRUO DE LAVA

👁️ 2 visualizaciones

Descripción

TÍTULO:
JULIO CÉSAR Y EL MONSTRUO DE LAVA.

CATEGORÍA 3:
2
º
de ESO

SINOPSIS:

            En
el s. VIIIa.C varios protagonistas de la antigüedad clásica, Julio César,
Octavio, Aníbal y Filípides, se reunieron para conseguir un tesoro situado en
un volcán. Para ello, tuvieron que enfrentarse a un monstruo. La diosa Atenea
salió en su encuentro para ayudarlos.

CRÉDITOS
DE PRODUCCIÓN:

·      
Creación
y guión

o   Daniel
Canales Gisbert

o   Jesús
González Cardós

o   Héctor
López Antequera

o   Carlos
Martí Martínez

·      
Grabación
y edición

o  
Juan Miguel Salvador Bermejo

TÍTULO: JULIO CÉSAR Y EL MONSTRUO DE LAVA.

GUIÓN

Érase una vez en Roma, en el 766 a.C., Julio César, que era un militar que
consiguió el poder, tenía una gran admiración por los volcanes y un día empezó
a buscar compañeros para iniciar su aventura.

Un día se encontró e interesó por unos soldados romanos, que eran: Octavio,
que era su hijo adoptivo y su sobrino; Filípides, que era el soldado griego de
la guerra de maratón, que recorrió 42 kilómetros hacia Atenas, para anunciar la
victoria y por último, un dirigente cartaginés llamado Aníbal de apellido
Barca.

De camino hacia el volcán, todos se sorprendieron de  ver un gran resplandor detrás de los árboles.

Al mostrarse dudosos, fueron a
investigar y se toparon con la grandiosa Atenea, la cual les preguntó hacia
donde se aventuraban y ellos al instante le respondieron que se dirigían hacía
el volcán púnico.

La diosa Atenea les advirtió que ese volcán estaba maldito y custodiado por
el guardián de lava, creado por el Dios Hermes, por lo tanto, la diosa Atenea
les otorgó varios elementos místicos.

Atenea: Le doy a Julio César una armadura ignífuga, para adentrarse en el
volcán, ya que es el más valiente del equipo. Le doy a Octavio unas gafas para
ver las pisadas invisibles del monstruo de fuego. Le doy a Filípides unas botas
de super velocidad para escalar con mayor facilidad el volcán y distraer al
monstruo. Le doy a Aníbal un machete embrujado, con magia oscura, para
atravesarle el corazón al monstruo de lava, sin convertirse en una estructura
de magma.

Una vez con estos elementos, todos fueron al volcán a destruir al monstruo
y coger el tesoro.

Subiendo, todos empezaron a hablar del monstruo. Octavio estaba incitado a
ir por sus estudios del monstruo.

Filípides estaba atemorizado,
ya que cuando era pequeño sus padres le contaban historias sobre este ser.

Julio César era el más
ilusionado porque quería arrebatarle el tesoro al monstruo de la lava.

Y por último Aníbal, que
andaba impaciente por lo que pudiera pasar, a él y a sus amigos.

Después de un rato llegaron a
su destino principal; el volcán.

Octavio rápidamente pudo ver los pasos del monstruo los cuales se acercaban
cada vez más a ellos y sin más embrollos, éste avisó gritando.

De repente el terrible
monstruo se dejó ver, lo cual provocó que Filípides agarrara a Julio César y lo
llevara rápidamente al volcán con sus botas, para arrojarlo con la armadura y
recoger el tesoro, mientras tanto los demás se encargan de asesinar al
monstruo.

Aníbal le clavó la espada embrujada en el corazón, matándolo al fin.

Y cuando
menos se lo esperaban Julio César salió con el tesoro, se lo repartieron entre
ellos, dándole una pequeña parte a Atenea.

Comentarios

Copyright 2025 Elocuencias
Términos y condiciones
Política de privacidad

Premio ondas 2021
impulsa rtve
RRDD/4/1355/1019
sgae